El suicidio es una realidad que ha ido en aumento a nivel mundial, solo en Colombia se registraron 1.810 casos en el primer semestre del 2023, y 30.021 casos de intentos de suicidio. Esto nos indica que la depresión es real, que hay muchas personas con deseos de morir, y como iglesia del Señor no podemos ignorar este problema, puesto que muchos cristianos han tenido ideación suicida, y otros lamentablemente se han suicidado.
Si tú has experimentado deseos de no seguir viviendo, debes saber que no estás solo, yo, al igual que muchos, he estado allí, y la palabra de Dios ha sido mi salvavidas. Por tanto, lo primero que debemos hacer es correr a Jesús, el buen pastor de nuestras almas, el salmo 23 nos dice que él conforta/consuela nuestra alma. Así que permítele consolarte, hacerte saber que eres amado por él, y que él te da descanso en lugares de delicados pastos, donde puedes alimentarte de su palabra viva.
De manera que, aunque no quieras orar ni leer la biblia, hazlo porque así estarás permitiendo que su presencia toque tu vida, recuerda que Él sana los quebrantados de corazón y venda sus heridas (Salmo 147:3). Déjate rodear de su bálsamo de amor que te sana. Haz como Elías que después de desear morir, recibió la palabra del ángel del Señor, hizo como Dios le dijo, recibió fuerzas y siguió con su camino. De la misma manera, cuando seas atacado con pensamientos suicidas, escucha a Dios, aférrate a su palabra de vida, recibe sus fuerzas y sigue caminando porque Él tiene planes y propósitos para tu vida.
Versículo: Y volviendo el ángel de Jehová la segunda vez, lo tocó, diciendo: Levántate y come, porque largo camino te resta 1 Reyes 19:7
Confesión: Dios es mi pastor, Él me consuela, sana mis heridas y cura mi corazón. Él tiene un propósito en mi vida que será cumplido en mí. Estoy en Cristo y en él tengo paz, seguridad y confianza.
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