No permitas que tu pasado te detenga

Cargar con el pasado se convierte en un estorbo que obstaculiza tu crecimiento en el Señor. Por eso, en la lectura de hoy, te invito a reflexionar en la invitación que Dios nos hace de dejar el pasado atrás.

Pues, uno de los beneficios de ser cristianos es que Dios nos ha hecho nuevos. De modo que nuestros pecados fueron borrados, arrojados al mar y ahora estamos en Cristo, limpios y santos.

Así que no permitas que tu pasado te detenga, corre hacia la meta, en dirección del propósito de Dios en tu vida.

El Pecado Causó División, Pero Jesús Causó Reconciliación.

El libro de romanos en capítulo 5, describe como entró el pecado a la humanidad y la consecuencia que produjo: “El pecado de Adán introdujo la muerte, de modo que la muerte se extendió a todos, porque todos pecaron…”

Así que básicamente todas las personas han pecado, y como consecuencia están muertas espiritualmente, porque el pecado separa de Dios.

¿Quieres saber que es estar muerto espiritualmente? clic aquí

Sin embargo, Dios hizo algo para remediar la condición del hombre, envió a su hijo a pagar por nuestro pecado en la cruz. Por lo tanto, romanos 5:18 dice: “un solo acto de justicia de Cristo trae una relación correcta con Dios y vida nueva para todos.”

Así que la cura de tu pecado es Jesús, su sacrificio fue suficiente para reconciliarnos con Dios. De modo que ya no tienes que vivir bajo la sombra de tus pecados. Ahora has sido perdonado, y tienes una relación correcta con Dios.

No Cargues Tu Pasado, Dios Ya Lo Ha Olvidado.

¿Sabes algo? La paga por tus pecados fue altísima, costó el derramamiento de cada gota de sangre de un hombre inocente. Jesús sufrió una muerte de cruz, la crucifixión era un tipo de muerte muy cruel, y él no la merecía. Sin embargo, decidió entregar su vida así, para que tú tengas nueva vida en él.

De modo que honra su sacrificio y deja de cargar con tu pasado. No permitas que tus fallas sean una carga tan grande, que te impida avanzar en la carrera de fe que tienes por delante.

Por esa razón, recuerda esto: Dios ya borró tus pecados, Isaías 43:25 dice “Yo, yo soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, y no me acordaré de tus pecados.”

Así que el único que te podía condenar, decidió borrar tus fallas y no pensar en ellas nuevamente, ¿Por qué entonces, te dejas condenar por el pasado?

No Te Dejes Acusar, Ya Fuiste Redimido De Tus Pecados.

Una de las estrategias favoritas del diablo es recordarte tu pasado, para que te sientas indigno. Así que el enemigo procura causarte remordimiento, pues esto origina que te sientas mal por tu pasado. Y de esta forma, te sientes acusado y condenado, deteniendo así tu crecimiento en el Señor.

Por eso decidí escribir este blog, porque yo he pasado por esto. Muchas veces, cuando decidía hacer algo para el Señor, venía el acusador a decirme cosas como “¿Para qué haces eso si mira como tú eras?” o “¿Cómo puedes hablar de Dios? Mira el pecado que cometiste”.

Y por mucho tiempo yo escuché esas acusaciones y les permití detenerme. Pero gracias a Dios, entendí la gracia de mi Señor y que soy justificada por él. De modo que ya no lo permití más, y empecé este proyecto de Abundante Vida en Cristo.

Así que si tú has pasado por algo similar, aprópiate de este versículo: “¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica. ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aún, el que también resucitó, el que además está a la derecha de Dios e intercede por nosotros.” Romanos 8:33-34

Nadie puede acusarte ahora, pues Dios mismo te puso en una relación correcta con él. Por lo tanto, nadie puede tampoco condenarte, ya que Jesús murió y resucitó por nosotros, y aún está en el lugar de honor, intercediendo por nosotros.

No Te Identifiques Con Tu Pasado, Aprende A Verte Como Dios Te Ve.

Dios es un Dios perdonador, amplio y grande en misericordia. Él no es como algunos humanos que dicen perdonar, pero a la primera oportunidad te recuerdan como les fallaste.

Para Dios, tus fallas son cosa del pasado que han sido totalmente borradas, por causa del sacrificio de Jesús. Y ahora él ve en ti, a alguien nuevo, sin ningún error, creado a su imagen y participe de su gloria.

De modo que de ahora en adelante, cuando el remordimiento toque a tu puerta, cierra las cortinas y dile que no estás en casa.

Así que cuando tus pecados pasados te quieran hacer sentir avergonzado empieza a hablar lo que Dios habla de ti:

  1. Soy nueva criatura en Cristo, alguien totalmente nuevo, que no ha existido antes. Así que no tengo pasado, Dios ha hecho todo nuevo. (2 Corintios 5:17)
  2. Dios me rescató de la oscuridad de mi pasado y ahora estoy en el reino de Cristo, y por él soy salvo y totalmente perdonado. (Colosenses 1:13-14)
  3. Ya no vivo yo, Cristo vive en mí, he muerto a mi antigua manera de vivir y ahora vivo por fe en el hijo de Dios, el cual me amó y murió por mí. (Gálatas 2:20)
  4. Yo estoy en Cristo, ya no vivo conforme a la carne, sino que vivo conforme al Espíritu. Por lo tanto, nada me puede condenar. (Romanos 8:1)
  5. Gracias a Jesús, yo soy aceptado por Dios, tengo acceso a su presencia y puedo llamarlo papito. (Efesios 1:6, Efesios 2:18, Romanos 8:15)
  6. Aunque no sea perfecto, no me detengo, sigo avanzando, no le permito al pasado detenerme, sino que prosigo a la meta, cumpliendo el llamado que Dios me ha dado. (Filipenses 3:12-14)

Estas 6 confesiones anteriores, son indispensables en nuestra vida. Pues, hacen parte de lo que Jesucristo hizo posible para nosotros. Es lo que somos en Cristo, es así como somos vistos por el Padre.

Así que háblalas de forma regular, interiorízalas en tu corazón, empieza a verte como Dios te ve, deja atrás tu pasado, y no permitas que el ayer te detenga para hacer lo que Dios te manda hoy.

Ve y disfruta la vida abundante en Cristo. Gracias por leer todo.

No te olvides de compartir. Pasa por AQUÍ antes de irte. Y nos vemos a la próxima.

Comparte
Scroll al inicio