Todos anhelamos una vida agradable, sin importar la edad, la raza o la nacionalidad. Sin embargo, en esta búsqueda por tener una buena vida, existen dos errores fatales que impiden que goces de ella.
Por eso es importante que aprendas a identificarlos, de tal manera que puedas disfrutar de la clase de vida que Jesús pagó y compró para ti.
Error #1: Desconocer lo que tienes.
Imagina a un padre muy rico, dueño de las empresas más exitosas. Su hijo vive en un país lejano, así que él le envía dinero mensualmente. Sin embargo, llegó un día en el que el hijo no recibió más su mensualidad. Este se enojó con su padre y creyó que había sido abandonado, de modo que cortó toda comunicación con su casa.
El tiempo pasó y el joven había atravesado grandes dificultades. Entonces, una mañana recibe la llamada de un empleado de su padre. Este le explica que su padre falleció y que al ser dueño de toda la herencia ya no era necesaria la mensualidad.
El empleado le aclara que el dinero está a su nombre y habían tratado de buscarlo para que pudiera disfrutarlo, pero había sido muy difícil encontrarlo. ¿Enseñanza? este joven pasó dificultades por desconocer lo que le pertenecía.
¿Te parece lógico no disfrutar de tu herencia por desconocer su existencia? Pues a veces, como hijos de Dios nos sucede algo parecido. La biblia dice que somos herederos de Dios y coherederos con Cristo. Por lo tanto, nosotros tenemos herencia al estar en Cristo.
Jesús vino a restituirnos lo que habíamos perdido por causa del pecado. Cristo vino a devolvernos lo que satanás nos había quitado cuando entró el pecado en el jardín del Edén. Gracias a la obra de Jesús en la cruz, nosotros ahora tenemos acceso a toda la bendición de Dios, a toda la herencia del Rey.
Debido a lo que Jesucristo hizo en la cruz, ahora todas las promesas de Dios nos pertenecen y son una realidad en nuestra vida. Así que no seas como el hijo que desconoce su herencia y pasa necesidades.
Evita el error de desconocer lo que es tuyo. Estudia diligentemente la palabra de Dios. Ahí se encuentra consignada la herencia que te pertenece por ser hijo. Ese es tu testamento, el documento que te ratifica como heredero de las promesas, dueño de las bendiciones.
Eres coheredero con Cristo lo que quiere decir que heredas lo mismo que Él. Así que Jesús comparte su herencia contigo. Por lo tanto, lo que es de Él también es tuyo.
Error #2: Confundir la voluntad de tu Padre.
En la historia del padre rico y su hijo ¿Por qué el joven cortó toda comunicación con la casa de su papá? porque pensó mal de su padre, él creyó que su papá lo había abandonado.
Él estaba muy confundido sobre la voluntad de su padre, no sabía lo que su papá quería para él y como consecuencia pasó por muchas necesidades.
Pero tú no tienes por qué ser así. Tú puedes conocer la voluntad de Dios. Estudiar la biblia te ayudará a disfrutar los beneficios de ser hijo del dueño. Y te va a evitar la confusión acerca de lo que Él quiere para ti.
Muchas veces cuando enfrentamos dificultades, nos confundimos y empezamos a creer que eso es lo que quiere Dios. Así que esa confusión nos hace conformarnos y resignarnos a las dificultades. Pero te quiero decir un secreto: Dios no te quiere derrotado, su voluntad es que tú estés por encima de las adversidades.
Por lo tanto, no culpes a Dios de los problemas que vives. La culpa es de alguien más: Tú tienes un adversario, alguien que no quiere que disfrutes tu herencia, alguien que quiere que te confundas y pienses que tu Padre te ha abandonado.
Vamos a leer un versículo que te va a quitar la confusión: “El propósito del ladrón es robar y matar y destruir; mi propósito es darles una vida plena y abundante.” Juan 10:10 NTV
¿Quién es el ladrón? Satanás. ¿Qué es lo que quiere? Robarte, matarte y destruirte. Así que llevemos esto a la vida diaria: Si tienes un problema financiero y estas a punto de perder tu casa ¿Quién es el que quiere robar tu vivienda? El ladrón/satanás.
Si tienes una enfermedad incapacitante e incurable ¿Quién quiere matarte con esa enfermedad? El ladrón/satanás. Si tienes tu hogar y empiezas a tener peleas con tu conyugue ¿Quién quiere destruir tu familia? El ladrón/satanás.
¿Te das cuenta que todo lo que se presente en tu camino que te robe, mate o destruya (en cualquier sentido) viene del diablo y no de Dios?
Así que la próxima vez que sientas confusión sobre la voluntad del Padre para ti, continua leyendo la siguiente parte de ese versículo ¿Cuál es el objetivo de Jesús? Darte vida ¿Qué clase de vida quiere darte? Una vida plena y abundante.
Por lo tanto, cuando pases por dificultades, recuerda: para recibir de Dios necesitas fe y para tener fe, necesitas conocer las escrituras. Por lo tanto a medida que lees la biblia y conoces las promesas de Dios, vas a crecer en fe y vas a disfrutar la vida abundante en cristo.
De modo que la clave para gozar de la abundante vida en Cristo es conocer la voluntad del Padre y no confundirla con el propósito del ladrón.
Siempre recuerda que en Jesús está tu bendición.