Si yo te preguntase qué es para ti tener vida abundante, seguramente me responderías muchas cosas, excepto estar enfermo, porque definitivamente la enfermedad no es algo que pueda ser asociado con el bienestar.
Por lo tanto, ya que el objetivo de Jesús es darte vida en abundancia, la enfermedad no está dentro de su propósito contigo. Así que la sanidad entra dentro del paquete de regalo que Jesús nos entregó hace más de dos mil años. En ese sentido, debes tener claro que Dios quiere que tú estés y permanezcas sano.
Por tal razón, quiero que analices junto a mí las siguientes citas bíblicas que demuestran que la voluntad de tu Padre es la sanidad total:
1.Éxodo 15:26 “… Porque yo soy el Señor tu sanador»
Dios se revela a sí mismo como tu sanador. Dentro de su propósito está que tú permanezcas dentro de su sanidad. De Él proviene toda buena dadiva y todo don perfecto, así que de Él recibes la sanación que necesitas.
2. Gálatas 3:13 “ Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero)”
Si estudias la ley de Moisés, te das cuenta que la maldición por quebrantarla incluía tres áreas: pobreza, enfermedad y muerte. En ese sentido, la enfermedad es una maldición. Pero nosotros en Cristo fuimos redimidos de ella. Jesús cargó con ella al morir en la cruz. Así que gracias a la obra de Jesucristo, nosotros no tenemos por qué andar enfermos, pues Jesús nos redimió de esa maldición.
3. Isaías 53:4-5 “Ciertamente él cargó con nuestras enfermedades y soportó nuestros dolores, pero nosotros lo consideramos herido, golpeado por Dios, y humillado. Él fue traspasado por nuestras rebeliones, y molido por nuestras iniquidades; sobre él recayó el castigo, precio de nuestra paz, y gracias a sus heridas fuimos sanados.”
Esta es ciertamente una de mis escrituras favoritas. Aquí se describe la obra de Jesús en la cruz. Él cargó con nuestras enfermedades y dolencias, para que nosotros no las cargásemos. Esta escritura demuestra que la sanidad entra dentro de la obra redentora de Cristo Jesús.
Esta misma escritura es citada Mateo 8:16-17 para decir que fue cumplida en el ministerio de Jesús, al sanar a todos los enfermos que le fueron llevados. Y luego es usada en 1 Pedro 2:24 “Él mismo, en su cuerpo, llevó al madero nuestros pecados, para que muramos al pecado y vivamos para la justicia. Por sus heridas ustedes han sido sanados.”
Y quiero que notes algo, dice que llevó nuestros pecados en la cruz y al final menciona que por sus heridas hemos sido sanados. Y esto se debe a que el pecado causó la caída del hombre y con ello entró la muerte, y en consecuencia la enfermedad.
Por tal motivo, Jesús solucionó en primer lugar, la causa y luego los efectos. Al quitar el pecado, se quita todas sus consecuencias. En este sentido, Jesús ya pagó por la consecuencia de nuestro pecado, incluyendo la enfermedad, así que ya no tenemos que cargarla.
4. Mateo 9:35 “Jesús recorría todos los pueblos y aldeas enseñando en las sinagogas, anunciando las buenas nuevas del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia.”
Jesús es el verbo hecho carne. En otras palabras, Jesús es la voluntad de Dios en acción. Todo lo que Él hizo mientras estaba en la tierra, refleja la voluntad del Padre (Juan 6:38). Por lo tanto vemos que la voluntad de Dios incluye la sanidad de los enfermos.
Dios no hace acepción de Personas. Él tiene la disposición para sanar a todos los que se le acercan. Un ejemplo de esto, es el leproso que se acerca a Jesús en Mateo 8:2-3 y le dice “Señor, si quieres, puedes limpiarme.” La respuesta de Jesús muestra su buena voluntad: “Quiero, se limpio.”
Así que el poder sanador del Señor está disponible para todos. Sin embargo, vemos que Jesús siempre les decía “conforme a tu fe, sea hecho”. De allí la importancia de estudiar estas escrituras, para que tengamos la fe que recibe la sanidad que ya está disponible para todos.
5. Hechos 10:38 “Ese mensaje dice que Dios ungió a Jesús de Nazaret con el Espíritu Santo y con poder, y que él anduvo haciendo el bien y sanando a todos los que estaban oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.”
Es maravilloso saber que Jesús anduvo haciendo el bien, no el mal, y sanando, no enfermando. Esta es la voluntad del Padre para ti. Tú eres amado por Dios, y el amor es anhelar el bienestar del ser amado. De esta manera, tu Padre desea lo mejor para ti, Él no quiere verte enfermo ni afligido.
Por otro lado, mira que esta escritura dice que Jesús sanó a todos los que estaban oprimidos por el diablo. De tal manera que la enfermedad es una aflicción provocada por el diablo, pero gracias a Dios que mayor es el que está en nosotros que aquel que está en el mundo. El diablo hurta, mata y destruye, pero Jesús nos da vida plena y abundante.
6. Marcos 16:18(b) “Además, pondrán sus manos sobre los enfermos, y éstos sanarán.”
En Marcos 16 el Señor Jesús da la orden a sus discípulos de ir a todo el mundo y predicar el evangelio. Y dice que a los que crean le seguirán unas señales, dentro de esas señales está la sanidad de los enfermos.
Así que si Jesús nos ha comisionado a ir e imponer las manos sobre los enfermos, quiere decir que dentro de su plan está la sanidad. Además, recuerda que si tú eres creyente, tú eres parte del cuerpo de Cristo. En este sentido, en Jesús no hay enfermedad, Él es el sanador, así que como parte de su cuerpo, tú no tienes por qué andar enfermo.
Por lo tanto, la próxima vez que el diablo quiera afligirte con una dolencia o una enfermedad, habla estos versículos sobre tu vida. Recuerda que Dios te quiere sano, y recuérdale al diablo que por causa de la obra en la cruz, tú ya has sido sanado. Por consiguiente, disfruta la total sanidad incluida en la abundante vida en Cristo.
Completamente de acuerdo Ginna. Jesucristo es mi sanador!
Así es!
Prima muchas gracias por esos mensajen tambonitos por nuestra salvacion. Con cristo jusus